Book club: CURRICULUM XXI Heidi Hayes Jacobs

IMG_0618 ¿Qué queremos que sepan y sean capaces de hacer nuestros alumnos?

En los primeros capítulos la autora nos ayuda a responder esta pregunta.

Nuestros alumnos nos piden que nos detengamos, reflexionemos,  hagamos elecciones inteligentes que nos animemos a repensar nuestros planes/diseños curriculares.  En esta tarea tenemos que tener siempre presente el fin, hacia dónde nos dirigimos…

Es imprescindible que nos convirtamos en investigadores activos y desarrolladores de innovaciones, tengamos nuevas directrices…

A veces  trabajamos con “CURRÍCULOS CAVERNARIOS”, las  antiguas costumbres están muy arraigadas. Las escuelas no se diseñaron para los niños, responden a las necesidades de una sociedad industrial. (180 días de clases que corresponden al calendario agrario, en general 6 horas de clases y 8 materias…) Piaget nació en 1896 demasiado tarde para reorientar a los creadores del currículo para decirles quiénes son los niños,  qué y cómo aprenden.

La escuela no necesita reformas, necesita una nueva forma.

Un nuevo currículo necesita una revisión

  • la sustitución de contenidos por competencias
  • la sustitución de las  evaluaciones por opciones más actuales

Pasos y estrategias:

Es un  proceso de actualización de elementos específicos del currículo existente seleccionando algunos.

No es un modelo de cambio es de crecimiento.

Hay 4 estructuras que afectan al currículo.

  1. el plan
  2. la forma de agrupar a los alumnos
  3. la configuración del personal
  4. el uso del espacio físico y virtual

La educación tiene que ver con el crecimiento, se obstaculiza por las frustraciones que generan  las estructuras programáticas en su implementación.

Hay auténticos mitos,  obstáculos

  • Los buenos días del pasado aún continúan vigentes
  • Estaremos mejor si todos pensamos igual
  • Un exceso de creatividad puede ser peligroso

Las comunidades que han sido capaces de crear y sostener una innovación atractiva buscan el crecimiento, no la nostalgia.

Tenemos que centrarnos en las herramientas necesarias para una construcción lógica y razonada de los saberes en los diversos campos y cultivar también una cultura que promueva la creatividad en nuestros alumnos.

¿Por dónde empezamos?

La autora se refiere que no es suficiente cambiar un pizarrón por una pizarra electrónica, o un cuaderno por una tableta, no es cuestión sustituir lo que venimos haciendo, es cuestión de reemplazar, transformar  algunas prácticas vigentes.

Un camino posible es comenzar por las evaluaciones, trabajar en la revisión de los contenidos y las  destrezas. La evaluación es lo que le permite al alumno mostrar su producción, la que demuestra su aprendizaje, su conocimiento  y su visión de los contenidos, destrezas, habilidades, competencias.

 

 

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